12 diciembre 2007

10 diciembre 2007

La hija del Gobernador (III)

Frente a frente, pero en esta ocasión de día, a cielo descubierto y con el rol intercambiado. Ella de ladrón y él de uniforme, Teresa de la Santa Cruz y Felipe Trujillo habían cambiado el perfume de la seda y las azucenas del palacio por el olor picante de la pólvora y la madera ardiendo. Frente a frente, pirata y militar, princesa y bandido, criminal y príncipe. La confusión abrumaba al capitán, que fue incapaz de articular palabra.

-“No sólo has matado por mis sábanas, también te has mantenido con vida”, dijo Teresa dirigiéndose a su amante, vencedor en la batalla pero desarmado en el alma.
-“¿Todo esto sólo para ponerme a prueba?”, respondió él desde su asombro.
-“No te pongo a prueba. Era una batalla pendiente”
-“¿Contra tu padre o contra mí?”
-“Contra ninguno de los dos. Sólo luchaba contra mí”, aseveró Teresa mientras volvía a anudar el pañuelo rojo sobre su cabeza. “Y he vencido”

La hija del gobernador besó la mano de su oponente y caminó hacia la amura de estribor. Desplegó una barca con remos, en la que una manta y un baúl repleto de fruta fresca delataban que aquella escapatoria era premeditada. El capitán no reaccionó, consciente de que estaba asistiendo a la despedida definitiva de su amor. Teresa de la Santa Cruz y Schleswig se deslizó por una jarcia hasta la barca en la que dedicó su última mirada al capitán Trujillo, en cuyos ojos siempre vio la necesidad de tomar una decisión. Pero esa decisión no fue la que él esperaba. Ni gobernador ni soldado, la joven de sangre azul, la nariz más puntiaguda al sur de la Florida, decidió abandonar su palacio y los brazos uniformados de su amante para buscar nuevas aventuras entre asaltos, tabernas y guaridas secretas. Su barca se perdía entre el oleaje y Felipe Trujillo, el oficial más valiente de Isla Tormentosa, regresó a su fragata “Incertidumbre” para poner rumbo a las costas en las que ya sólo habitaba su pasado.

Pero aquella no fue la última batalla del capitán. Felipe Trujillo siguió defendiendo la insignia española en las azoradas aguas del Caribe y haciendo resonar su nombre hasta en el último rincón del Golfo de México. A veces como oficial de marina, a veces como corsario de la Reina. Las balas de sus cañones hacían temblar a los delincuentes. Sin embargo, su primer disparo ahora le hacía temblar a él. Felipe Trujillo, capaz de convencer a su amada de que siempre le sería sincero, rezaba a Dios para que su enemigo se percatara de la segunda bandera que ondeaba en el palo mayor. Una sábana de seda sustraída del dormitorio del Palacio del Tormento en el que un día le esperaba quien no era más que la hija del Gobernador.

Fin

08 diciembre 2007

La hija del Gobernador (II)

Amaneció Felipe Trujillo con la energía necesaria para afrontar una batalla. Sus informes indicaban que aquella mañana la flota de un pirata desconocido atacaría el puerto de Isla Tormentosa. Pero el capitán no tenía miedo. Le protegían su sable, sus tropas y el compromiso de defender aquellas costas en las que habitaban su historia, su honor y la sangre de Teresa.

Embarcó en su fragata, a la que había bautizado como "Incertidumbre". Partió algunas millas mar adentro y patrulló atento al horizonte. A lo lejos vio acercarse lo que parecía una carraca holandesa. Distinguió una bandera negra y diez o quince cañones, tal vez menos. Pitó a zafarrancho y sus barcos comenzaron a disparar.

No fue una batalla difícil. La artillería de la flota del capitán pronto destrozó el casco del invasor y dejó inservible su velaje. La "Incertidumbre" se aproximó a la malograda carraca y la tripulación abordó la eslora. Los soldados españoles acabaron con los marinos extranjeros y el capitán Trujilló saltó hasta la cubierta del enemigo. Ordenó a los supervivientes que lo llevaran ante el capitán y, desde la popa, con paso decidido, el capitán pirata se fue aproximando hacia el español. Un exótico andar dejó entrever una elegancia inusual en los piratas, a los que Trujillo conocía bien.

Su enemigo vestía un pantalón ceñido y pulseras de oro en ambos brazos. Cada vez más próximo, Trujillo se sorprendió ante la delgada silueta que tenía frente a sí, coronada por un pañuelo rojo que cubría el cabello rubio y rizado que tantas veces besó. Teresa de la Santa Cruz había desafiado al gobierno de Isla Tormentosa.

Esta historia continuará exhibiendo tópicos en una próxima tercera parte.

06 diciembre 2007

La hija del Gobernador (I)

Tenía el cabello rubio y rizado, y los ojos más azules del Caribe. Era la herencia de su madre, hija de un militar del norte de Europa que viajó a las Américas sirviendo a la corona española. Tenía también la firmeza de su padre, don Gregorio de la Santa Cruz y Ruiz de Valdezate, Gobernador de Isla Tormentosa, hijo de mercaderes europeos emigrados al Nuevo Mundo en busca de oro y plantaciones de maíz.

Teresa de la Santa Cruz y Schleswig, la nariz más puntiaguda al sur de la Florida, era la hermosa razón por la que Felipe Trujillo, oficial de marina, colgaba cada noche el uniforme para escalar la fachada del Palacio del Tormento hasta el balcón del dormitorio de la hija del Gobernador.

Ese era el otro uniforme del Capitán Trujillo, el de ladrón. Hábil y sigiloso trepador capaz de burlar una y otra vez la seguridad de la sede del Gobierno, de convencer a su amada de que siempre le sería sincero y de dar la mano a su padre en cada banquete mostrando sus respetos hacia su esposa e hija, fingiendo ser uno más de los cientos de soldados del Gobernador que suspiraban resignados por los tirabuzones de Teresa.

Aquella noche, Felipe Trujillo tardó más de lo normal en llegar al balcón. Había disfrutado de un día de permiso, una oportunidad perfecta para asaltar barcos extranjeros como corsario de la Reina. Pero aquel domingo su víctima había sido un mercante español que se resistió a sus andanadas.

- "¿Ya no respetas ni a tu bandera?", le inquirió Teresa.
- "Mi única bandera es la que te cubre en tu cama aristocrática". Ella empezaba a sonreír.
- "...Sólo es un poco de tela"
- "Mataría por ella", contestó Felipe, quitándose sus guantes negros.
- "¿Y también te mantendrías con vida?"

El Capitán Trujillo, el oficial más valiente de Isla Tormentosa, no se atrevió a responder. Apagó las velas del dormitorio y consumó una vez más su traición al Gobernador, ignorante de todo aquello, y su promesa a Teresa de entregarle cuerpo y alma cada día que concluyera sin desangrarse en el mar o en tierra firme.

Aquella noche Felipe se despidió de la hija del Gobernador besando su mano, como lo hacía cada vez que la saludaba delante de su padre... Los dos sabían que la próxima noche tal vez no volverían a verse.

14 noviembre 2007

Ya pasó

Se acabaron las vacaciones. Cuatro semanas que escribirán su propia página en el libro de la memoria. Allí se quedan la playa, la escuela de inglés, un montón de gente encantadora y las enseñanzas del reggaetón. De todas sus grandes frases (no olvidemos hermosas y elegantes metáforas como "te di donde te gusta a ti, ahí en el centro, y te dejé con la bala adentro", "cuando me lo agarra yo lo tengo tieso" o "haremos sexo con ropa"), hoy me quedaré con una más popular: lo que pasó, pasó. Y allí quedó. Ahora toca volver al mundo real, en el que sigue pasando de todo.

El espíritu de estas cuatro semanas se traslada a mi fotolog, donde pretendo -sin prometer- ir publicando las fotos de las vacaciones. Gracias por los comentarios de este último mes, los he apreciado mucho.

07 noviembre 2007

In Gold we trust

En nuestro capitulo de prejuicios, hoy analizaremos a la sociedad estadounidense. Y lo haremos partiendo de la vieja premisa que, no por manida es menos cierta, asegura que este pais lo fundaron criminales, prostitutas y herejes con animo de lucro.
Jamas he sentido la estafa tan proxima. Ni siquiera cuando llaman a la puerta esos senores de editoriales conocidas ofreciendo libros desconocidos que ni necesitas y ni siquiera estas viendo, pero que de algun modo te apetece comprar. Los comerciantes estadounidenses de Miami, damas y caballeros, [se abre generalizacion] son gentuza [se cierra generalizacion]. Las unicas excepciones que he encontrado son procedentes de Cuba. De todos los demas, desconfiare siempre.
No se sirvan de argumentos como la influencia del Caribe, la cultura latina ni otras teorias de dudosa base antropologica. Los mayores hijos de puta que me cruzo por aqui hablan americano perfecto y no saben donde esta Australia. O sea, son estadounidenses nativos. Quieren tu pasta, tus billetes verdes, y como todos tienen el mismo tamano (ya va siendo hora de aprender del resto del mundo, amigos de la Reserva Federal), intentan colarte billetes de 1 cuando tienen que dartelos de 5. Ayer, sin ir mas lejos, me colaron uno en una cafeteria.
Por no hablar ya de que siempre se olvidan del cambio, de que los lectores de codigos de barras marcan mas que el precio en las estanterias o de que cada dia el mismo producto cuesta distinto. Por supuesto, los precios raramente se exhiben en Miami. Lo mejor es preguntar y, al igual que un bazar de Tanger, regatear. Marco Polo con las especias era mucho mas honesto. Pero claro, estos Estados Unidos de America fueron fundados por ladrones, senoras bigotudas y ratas con peluquin.
Es bien sabido que aqui te piden propina por todo. Mas que pedirla, te la exigen. Por si no fuera suficientemente vergonzoso cobrarte 20 dolares solo por entrar a un garito (sin copa incluida) y sacarte 11 dolares por cada cubata (en vaso de plastico, lleno de hielo picado y con ron barato y mucha cocacola aguada), los camareros se hacen los graciosos y te piden sin complejos sus dolarcitos de propina. Asi pasa, que en cada bareto de pacotilla hay personal para parar un tren: un camarero cada cuatro o cinco metros, seguridad en cada esquina, guardaespaldas para cada stripper (esto me lo han contado porque yo no voy a locales de strip-tease como el Mansion, en el 1235 de Washington Avenue, un poquito mas lejos que Cameo pero mas cerca que Privee). Y el senor del cuarto de bano, que merece parrafo aparte.
Cobrarte por mear me parece lo mas miserable del mundo, y no creo que tarde en llegar a Espana, media Europa ya lo hace. Aqui hay un tipo en cada retrete que espera a que acabes, te pone jabon liquido en las manos y te lanza sonriendo una toalla como si fuera Tom Cruise en Cocktail. Calcula cuantas veces vas al bano en una noche de marcha, multiplicalo por el aforo y conviertelo en dolares. Es el negocio de la urea, con el que miles de estadounidenses se frotan sus humedas y pestilentes manos.
Pero sigamos con las propinas que, ya que estamos en materia, es pa mear y no echar gota (aun asi tambien pagas). Todo el mundo sabe que si vas a un pais donde siempre se dejan propinas pues se dejan propinas y punto. Hay quien dice que es una senal de atraso, aunque a mi me parece elegante y hasta conveniente, y en Espana las defiendo. Te ha gustado el servicio? Dejas propina. No te ha gustado? Pues no la dejas. Una forma eficaz y transparente de evaluar y motivar al personal de los locales. Pero de ahi a que te la planten en la cuenta como si estuviese regulado por el articulo 123 de la Constitucion hay un abusivo paso de un 17% que no entiende de calidad ni esfuerzo. Las "tips and gratuities" van proporcionales a lo que gastas, aunque al camarero le cueste el mismo trabajo llevarte a la mesa una botella de Boda Real que una cocacola light sin hielo y sin limon.
Y asi podriamos seguir. Ahora mismo tengo en la cabeza al taxista que me trajo del aeropuerto, al tipo de la tienda de gafas de sol, a los dependientes de Foot Lockers, al camarero de Segafredo, al barman de Space, a la de la supuesta barra libre de Mansion y a un monton de hijos de puta que, victimas de su propia historia, recuerdan al mundo que esta republica nacio del vientre de un grupo de buitres, esquimales sin afeitar y una sopa primitiva de bilis y acido urico.

02 noviembre 2007

Crisis

Imaginate que, en plena resaca, despues de haber dormido tres horas, te despierta una sirena antiincendios a trescientos decibelios, estridentes mensajes en lenguas extranas que gritan "evacuen el edificio inmediatamente", sales de la cama y te cruzas con el profesor a cuya clase no has ido, evacuas el edificio en llamas y te encuentras conque fuera hay un huracan y, para rematar, descubres que no solo te sientes zombi sino que ademas lo pareces, porque la noche anterior te acostaste maquillado despues de una excesiva fiesta de Halloween... No, hoy no ha sido un buen dia.
En realidad no habia fuego (ha sido un puto simulacro a las 11 de la manana, quien sabe si en venganza por la escasisima asistencia a clase), la tormenta tropical en Miami ha sido un pedo y afortunadamente me quite la pintura de vampiro antes de acostarme. Pero si no adornara la realidad nadie leeria este blog. Aun asi, el dia no ha sido de los mejores.
En mi tercera entrega de miserias, comienzo apuntando lo dificil que es hacer planes aqui. Escribo a la una y media de la manana tras el intento frustrado de salir al Cameo, uno de los night clubs (suena a puticlub, pero asi llaman aqui a los garitos) a los que solemos ir. Aqui hay mucha gente y dar un paso en grupo cuesta una eternidad. De tanta gente que hay a veces lo que te pide el cuerpo es estar solo, algo que en mi dormitorio, por cierto, es imposible. Y no precisamente porque me lo llene de churris todas las noches. Comparto habitacion con otros tres estudiantes, y dos de ellos jamas salen de ella. Jamas. Ni siquiera hoy con el simulacro. Uno porque siempre esta estudiando, y el otro no se que hace. Pero siempre estan alli, en esa habitacion pequena, desordenada y que huele a internacionalidad poco ventilada. Cuando camino por los pasillos de la residencia escucho musica, risas, fiesta... hay vida en las habitaciones. En la mia no, o al menos no es la vida que conocemos los humanos.
Es por ello por lo que la intimidad la tengo que buscar fuera. Hoy fui solo a la playa, aprovechando un momento en el que el sol volvia a brillar. Era solo un espejismo. Lo divertido que tiene el clima aqui (espero que el chaman me lo explique) es que estas tan tranquilo tomando el sol en la playa y a los tres minutos la arena se te esta incrustando en la piel a 90 km/h, el cielo se vuelve negro como en una pelicula de Disney y sobre tu toalla comienza a caer un aguacero bajo la produccion de Jerry Bruckheimer.
Y estos son solo algunos de los despropositos de este insulso dia. Una pesadilla antes de navidad y despues de Halloween que, por cierto, estuvo bastante bien. La gente se vuelve completamente loca con esta fiesta, que tonteria mas divertida. No puedo colgar fotos porque aqui la caja de los ordenadores esta encerrada con llave, y el precio de los cibercafes es estupidamente caro (8 dolares por hora, maldita sea, cuando hay wi-fi publica hasta en la playa). Quiza un dia de estos pague la dolorosa cantidad para poner algunas fotos. Pero es que por ese precio me compro un Dodge.

31 octubre 2007

Hallo-wind

Que viene el huracan, mamita, que viene el huracan. Y no, no es el ultimo verso del reggeaton miamense, es la puritita verdad. Que hoy casi se me vuela una japonesa en la calle y los de la escuela han retirado las tumbonas de la piscina. Han convocado una reunion extraordinaria en la cafeteria para darnos instrucciones. Concretamente una: "mequetrefes, llamad a vuestra familia y decidles que no pasa nada, porque esos gandules de las televisiones magnifican estas cosas". En ese momento he silbado con disimulo, mirando hacia el techo con las yemas de los dedos tocando la mesa.
Noel se esta sintiendo en Miami, y manana se notara mas. Asi que recuperamos el capitulo de las miserias de mi viaje: cuando hay mal tiempo aqui no hay nada que hacer. El viento hace que la arena de la playa te acribille y la lluvia, siempre intermitente, anula todos los planes. Hoy la hemos superado yendo al cine (Saw IV, pura caquita), pero ya veremos manana, que es la fiesta de Halloween. Aqui es tradicion salir disfrazado por Lincoln Road, calle comercial de Miami Beach, que se convierte en una especie de bacanal callejera segun cuentan. Ya veremos si manana las brujas y los vampiros no vuelan de verdad.
Cuando hablo por telefono la gente me pregunta: "bueno, te estaras poniendo moreno, no?" Y me da lastima decir que sol sol, lo que se dice sol, lo he visto dos o tres dias. "Y hoy no vas a la playa?" "No, hoy hay huracan". Asi que, amigos de la desgracia ajena, puede que en los proximos dos o tres dias me aburra mucho. Se agradeceran las postales (tambien la paqueteria por FedEx y los envios por Western Union).

30 octubre 2007

Lo que como

Al agente Jack Bauer le gusta saber lo que come la gente, y convierte en literatura un desayuno turistico en Praga. Asi que, siguiendo sus ordenes, paso a comentar lo que me llevo a la boca en esta inquisicion gastronomica llamada EF Miami:
Por la manana, los dias que consigo levantarme, desayuno con los huevos revueltos. Scrambled eggs, se llaman. Suelo pedir beicon (el anteriormente conocido como bacon), y me ponen dos tiras ennegrecidas que para mi es lo mejor del desayuno: saben a sal y a aceite muy grasiento. Hay dias que cambio esta bomba nutricional por tortitas con chocolate. Suena mejor, lo se, pero las tortitas son tan cutres que al menos la sal del beicon es una garantia de sabor. Todo esto lo acompano con algo de beber. Y cuando digo algo es "algo", porque nunca sabes si lo que esta saliendo de la maquina de las bebidas es zumo, agua o ninguna de las dos cosas. Ahi es cuando la cocacola, aunque impopular como desayuno, se convierte en otra garantia.
La hora de la comida me la salto, porque a las 11 de la manana no tengo hambre, senores estadounidenses. Aguanto hasta las 5:30, terroristica hora de la cena, en la que acudo de nuevo a la cafeteria a dejarme sorprender. 'Chicken', 'pasta' y 'rice' son las constantes de una ecuacion que, aunque varia en su formulacion, deriva siempre en el mismo resultado. Por eso me agarro al sandwich de atun como salvavidas en medio de esta insulsa fuerte marejada.
Pero no todo es tan malo. Muchas veces lo que hacemos es salir a cenar fuera, a meternos costillares y japonadas teriyakis de esas. El dia de mi cumpleanos nos fuimos a un americano de los que huelen a parrilla. Maravilloso. Y en el cumpleanos de otra companera nos fuimos a comer sushi, que no me gusta, pero no me tocaba elegir a mi. Aunque hasta ahora el lugar con mas exito entre mis amiguetes es 'Fratelli della buffalla' (Washington Av. con 5th St., para los interesados). "Y te vas a EE.UU. para comer en un italiano?", pensaran algunos. "Pues si", respondo yo, que he comido la peor hamburguesa del mundo en Nueva York y la pizza mas deleznable en Roma. Los fratelli de la bufala estos son una gente muy maja, que hablan italiano, y que respetan la maravillosa costumbre americana de rellenarte la cocacola las veces que haga falta sin que se lo pidas. Te cobran $2.50 por el vaso, la mitad que en muchos sitios en Espana, y bebes en paz hasta morir. Esto es un pais.
Y para hacer la digestion, nada como el Starbucks, un lugar que odio en Espana pero que aqui tiene mas gracia. Se toman en serio lo de cuidar al cliente y toda esa vaina, hasta el punto de que el otro dia uno de los camareros, un cubano llamado Jamil, nos convencio para ir a una fiesta en Space. A mi no tuvo que convencerme mucho, la verdad, y la entrada gratis por cortesia de la escuela hizo el resto. Hay dos cosas que tenia que hacer antes de irme de este mundo: vivir una fiesta de Halloween en EE.UU., y pegarme el fieston en Space Miami. Este sabado hice las dos a la vez. Por suerte no me lleve la camara, aunque si tire de la del movil un par de veces. Y hoy, con el teclado desbloqueado, creo que le he mandado una de las fotos a mi madre sin querer... solo espero que algo haya impedido su recepcion. Ingenieros de telecomunicaciones, piratas informaticos y ministros de industria, necesito vuestra ayuda para eliminar el rastro de un MMS.
Asi que despues de pasarme el domingo durmiendo, este lunes, tras saltarme las clases, he ido a comprarle unas Nike a mi hermano, que es tradicion. Despues he comprado mi disfraz de Halloween y, tras un intento fallido de ir a ver Saw 4 al cine, han repicado las campanas del botellon en la playa. Yo he acudido con un Nesquik de medio litro, formato americano. Y creo que no va a ser la ultima vez que lo haga.

27 octubre 2007

Vantage point

Hoy he ido al cine con mis companeros de clase. Hemos visto Michael Clayton, la ultima de George Clooney, y lo cierto es que no me he enterado de nada, pero afortunadamente mi cachondisimo profesor ha confesado que el tampoco. Aunque mas que hablar de la peli o de las sabrosisimas palomitas chorreantes de mantequilla, lo que quiero es compartir mi momento cinematografico mas emocionante de los ultimos anos. Ha sido un trailer. Cumbre internacional contra el terrorismo, intento de magnicidio a lo JFK, ambulancias del 112 y peugeots de la Policia Nacional rodando por el suelo... todo en Salamanca. Dime si no es la pelicula que llevas esperando toda la vida.

26 octubre 2007

Miami Bitch

Cansado ya de hacer el idiota con el tonito "que-bien-lo-estoy-pasando", voy a contaros algunas realidades. Porque hay cosas que son iguales en todas partes, desde el estrecho del Labrador hasta el cabo de Hornos, y es que, amigos, la vida apesta, ya estes en Madrid o sobre las sucias arenas de Miami que, por cierto, son artificiales y ademas huelen a gasoil. No dejeis que os siga enganando.
Hoy he puesto la segunda lavadora de mi vida, porque uno de los objetivos de estas vacaciones es dejar de ser un inutil. Se que no lo lograre, pero al menos nadie me podra decir que no lo he intentado. Hace una semana compre una toalla verde en los Cayos de Florida: aqui son buenas y a buen precio. Ni que decir tiene que mis camisetas blancas son ahora verdes, igual que esos calzoncillos tan chulos con una calavera estampada. Y todos direis: "imbecil, la ropa blanca hay que separarla de la ropa de color" y yo dire "ya lo sabia, joder, pero en esta vida hay que arriesgar". Sabia que podia suceder, pero tambien creia que no siempre sucede. Y en mi ruleta rusa textil me he topado con la unica bala en el cargador del tinte. Una bala verde que ha desparramado los sesos de mi inexperiencia por todo el tambor de la lavadora del hotel Lorraine (al que acudo de incognito para lavar la ropa gratis, que aqui me cobran como cinco dolares, entre detergente, lavadora y secadora). Pero lo peor no es eso, sino las miles de pelusas verdes que se han quedado impregnadas en toda mi ropa. Algo que no habria podido evitar ni el mas experto de los lavanderos. Asi que mis consejos son los siguientes: no compreis toallas, no pongais lavadoras, no hagais nada. Y por cierto, Txemi tiene razon: no hace falta planchar. Nada. Ni las camisas. Pero, como sucede con hacer la cama, el que quiera que lo haga.
Bueno queridos, ya seguire con mis miserias. Ahora tengo que cortar porque el puto italiano se ha vuelto loco: iba a comprar una botella de agua y ha vuelto con una de ron y otra de vodka. Habra que responder. Por nuestra seguridad y la de nuestros hijos, para que puedan disfrutar de la democracia y la libertad de esta nuestra gran nacion. Un saludo para todos.
A todo esto, manana quitare de aqui esa estupida encuesta de la derecha.

23 octubre 2007

Homework

Yo he venido aqui a estudiar ingles, lo que pasa es que sois de pensar mal y solo porque haya salido de marcha seis de las siete noches que llevo aqui ya parece que estoy de cachondeo. Pero no, si hasta me ponen deberes... Hoy he ido al hotel mas caro de Miami Beach a preguntar precios, un ejercicio para una de mis clases. Un coleguilla venezolano y yo hemos fingido ser representantes de una empresa brasilena en busca del mejor servicio para nuestro presidente, que piensa venir a Miami. Y ha colado, a pesar de haber ido en banador. Asi que no os penseis que estoy todo el dia tocandome las bolas, que hoy por ejemplo he tenido que probar las mejores suites del Ritz-Carlton y pasear junto a su inmensa piscina frente al mar... Es muy duro hacer los deberes escuchando chill-out en el hilo musical mientras el personal del hotel mas lujoso de esta superficial costa te intenta convencer de que les elijas a ellos... muy duro.
Pero como no todo va a ser trabajo, este finde pasado nos fuimos unos cuantos de excursion a Key West, la ciudad mas meridional del pais, donde las viviendas no bajan de los dos millones de dolares. Un paraiso tropical donde anclaban los piratas y donde ahora llegan los balseros cubanos que huyen de Castro. La ciudad que decidio pintar de rosa sus taxis cuando la homosexualidad se censuraba en el resto del pais. Una islita donde todos viven felices y borrachos hasta que un huracan lo mande todo a tomar por culo. Por la noche, fiesta. Antes de llegar, snorkeling en Cayo Largo. Y de vuelta, paradita para comer con un concierto de reggae en la playa.
Y no me extiendo mas, que vuestra envidia me va a acabar matando. Pensad que al fin y al cabo aqui todo es superficial y la belleza que importa esta en el exterior. Asi que mientras os dejo pensando que hay de malo en todo eso, me despido hasta la proxima. Es muy duro estar aqui, lejos de mi tierra, teniendo que sustuir el asfalto de Madrid por la arena blanca de Miami Beach... muy duro.

19 octubre 2007

Pa que contaros...

Aprovecho unos minutos antes de ir a hacer botellon a la playa para dar noticias. Esto es tal y como os lo imaginais. Para que dar mas detalles. Pero que nadie piense que me toco las bolas, eh? Que menudo favor me esta haciendo la estupida encuesta esa. Me han puesto en el nivel mas avanzado y mis clases consisten basicamente en filosofar. Nada de gramatica ni mierdas de esas. Ya hemos tratado la reencarnacion, la vida extraterrestre, la posibilidad de que la retina humana registre permanente la ultima imagen que percibe y su hipotetica aplicacion a la criminologia, las mamadas de Monica Lewinsky, el divorcio de Sarkozy, los bares de Lavapies y un monton de historias promovidas por mi profesor, un tipo de lo mas peculiar del que ya podria escribir posts kilometricos. Pero la fiesta me llama y no me puedo retrasar. Pronto dare mas noticias. La pena es que no puedo colgar las fotos (las cajas de los PCs estan encerradas).
Muchisimas gracias por las felicitaciones. Se agradecen un monton, es muy duro pasar el cumpleanos lejos de casa, en la playa, rodeado de Hummers y entrando por la patilla a los mejores night clubs de Miami Beach... muy duro. Abrazos y gracias de verdad. Se os quiere. A lot.

17 octubre 2007

Moratoria

A quien corresponda:

Por la presente, y debido a las circunstancias especiales en las que me hallo, solicito una moratoria para la efectividad del aniversario de mi propio nacimiento y la aplicacion de todas sus consecuencias. La reflexion de hace un año sigue hoy vigente y por ello pido una prorroga a estos 26 años, con el fin de seguir afirmando, en estos dias mas que nunca, que "no se que cojones estoy haciendo, pero firmemente en la importancia de hacerlo".

14 octubre 2007

Miami Beach

Me ha faltado tiempo para todo, no sólo para actualizar. Pido comprensión. Pero ha llegado el momento de las vacaciones. A partir de ahora, y por cuatro semanas, pueden encontrarme en el 2469 de Collins Avenue, Miami Beach (es que se me llena la boca...). También, en este blog.
Más noticias, muy pronto.

18 septiembre 2007

15 septiembre 2007

El momento más feliz de mi vida (II)

Regresé a Madrid y traté de retomar mi vida. Busqué refugio en el trabajo, al fin y al cabo allí pasaba la mayor parte de las horas del día. Mientras estaba ocupado todo iba bien: mi cabeza se concentraba en aquellas noticias de sociedad y mis pensamientos dormían, que de eso se trata (no me pagan por pensar, como esgrime un futuro bloguero…). Pero las horas muertas son las que matan, y en aquellos momentos además lo hacían muy lentamente. Ni siquiera escondiéndome en el baño lograba disimular que estaba hecho polvo, que mi alegría y mi corazón los había perdido en algún lugar a diez mil kilómetros y en diagonal hacia el suroeste. Encontré complicidad en algunas de mis compañeras, que trataban de animarme con consuelos cargados de verdad pero carentes de puntería. Sabía que todo lo que me decían era cierto, pero los manuales de instrucciones no sirven cuando están mojados.

Un día, de camino a casa con una de ellas, comenté de pasada la inconveniente idea de volver a Buenos Aires. Un plan caro, desordenado y por el que el sentido común nunca apostaría. Pocas cosas me dan tanta pereza como dar explicaciones, y ni mi jefe ni mi familia lo encajarían a la primera. Además, pensaba que tampoco serviría de mucho retrasar la desolación sólo por unos días de felicidad… Y justo ahí estaba la clave. Ahora no recuerdo qué fue exactamente lo que me dijo mi compañera en su coche, pero los dos lo vimos claro: ¿cómo podía ser tan idiota? Esa misma tarde le pregunté a mi padre si aún tenía derecho a sus billetes de avión gratuitos.

–“No, ya los has gastado todos… ¿Por qué?”

–“No, por nada… que me voy otra vez a Buenos Aires”

Lo primero que me preguntó fue el precio. “…Pues sí que tienes que estar enamorado”, me contestó, declarando así que estaba comprendiendo perfectamente una historia de la que apenas le había dado detalles. Negocié en la empresa mis vacaciones: trabajaría en Navidad, año nuevo y Reyes, consumiría todas mis horas y días libres… Haría lo que hiciera falta. “Pero… ¿tan buena está?”, me preguntó mi jefe. Y los chistes de los cámaras mejor ni recordarlos.

El caso es que, días después, me encontraba de nuevo en el aeropuerto de Ezeiza. Allí había saboreado hacía mes y medio uno de los momentos más amargos de mi vida, sin saber que en aquel mismo escenario estaba a punto de vivir el que, hasta ahora, ha sido seguramente el más feliz de todos. Apareciste al fondo de la sala, esta vez sin compañía, protagonizando la escena cinematográfica más hermosa que ha dirigido la sinceridad. Tu sonrisa destacando entre tu piel morena, con esa camiseta de tirantes blanca y unos pantalones negros que se ajustaban a algo más que a mis sueños, compusieron el primer plano de una secuencia cuyo guión consistía solamente en un beso. Un beso observado por todos los extras sonrientes de aquella sala otrora maldita; un beso que me hizo abandonar la primera maleta solitaria que, por respeto a la solemnidad de aquella escena, no ha sido robada en la historia de Buenos Aires; un beso acompañado por la banda sonora de aquel mendigo que comenzó a entonar la letra de un sarcástico tango mientras nos miraba desde su silla, en uno de los mejores papeles secundarios que se recuerdan en el cono sur; un beso que comenzó en la sala de la escena final de la primera parte y que dio inicio a la segunda; un beso que siguió en el taxi desde el que esta vez no me enseñaste el Congreso ni el Obelisco, y que acabó entre la encimera de la cocina y el dormitorio en el que ya podía imaginar que el momento más feliz de mi vida no se iba a repetir.

11 septiembre 2007

El momento más feliz de mi vida (I)

“Mañana lloraré mucho, ¿lo sabes?”. Aquello no podía sorprenderte, si alguien me ha visto llorar has sido tú. Pero prefería advertírtelo, por si acaso. Es lo que tienen las últimas horas: generan frases estúpidas. La de páginas absurdas que se podrían escribir con las últimas voluntades de los condenados. Lo que yo no sabía hasta aquella noche era que el corredor de la muerte puede encontrarse entre unas suaves sábanas con olor a jazmín. Mi sentencia se hacía efectiva a las 14:10 del día siguiente, con dos horas de antelación recomendadas para facturar.

Efectivamente, al día siguiente lloré, aunque no tanto como los posteriores. Me preocupó quedarme sin pañuelos y pasarme el viaje moqueando, así que fuiste corriendo a la farmacia a comprarme un paquete mientras yo metía las maletas en el taxi (¿ves como sí me has hecho favores?). Llegaste con un paquete de kleenex… de marca Kleenex.

-“Te compré carilinas”

-“¿Carilinas?”

-“Sí, es una marca de pañuelos… acá todos se llaman carilinas, da igual la marca”

Era la primera vez en mi vida que veía un paquete de kleenex auténticos, diez, todos empaquetaditos y doblados como kleenex, y con el logotipo de “Kleenex” en el plástico… pero se llamaban carilinas. ¿Una señal? No, simplemente otra reflexión estúpida generada por la proximidad de un final. Pero en aquel momento el asunto de los kleenex me pareció fascinante.

De viaje al aeropuerto gasté un par de ellos. En el avión cayeron varios más. Llegué a Madrid con cuatro o cinco, de los que di cuenta en los días siguientes hasta dejar sólo uno. Aquel pañuelo solitario al que destiné a desaparecer en circunstancias especiales. No era un pañuelo normal (joder, un Kleenex auténtico…), era el pañuelo que reflejaba toda la tristeza de aquellas horas de vacío.

Abandoné Buenos Aires con el corazón sangrando. Aquel avión, aquel cielo sobre el Atlántico y aquel continente en el que nací y al que inevitablemente regresaba perdieron todo su interés. En aquel momento sólo respiraba dolor. Como si una áspera nube de aguarrás hubiera borrado de mi alma las ganas de seguir adelante. Sin ilusiones, sin esperanza. Aquel 12 de octubre, el único Día de la Hispanidad en el que entendí por qué Colón volvió dos veces, no tenía ni idea de que el momento más feliz de mi vida aún estaba por llegar.

07 septiembre 2007

No somos nadie

"Y en bañador menos", que diría por ahí uno que me sé... Pero en esta ocasión no voy a adoptar el tono nihilista que da sentido a todo lo que no lo tiene. "No somos nadie" es el mejor programa de radio de las mañanas. Y no lo digo porque trabaje ahí un genio como Clark Kent (bueno, sí, sobre todo lo digo por eso...). Pero es cierto que a todos los clones de la radiofórmula matinal, NSN les da una pasadita por la derecha, una lección de humor a quienes presumen de ser divertidos copiándose entre ellos sus modelos caducos de supuesto entretenimiento radiofónico.
Cuando Gomaespuma abandonó M80 llegó un programa que a muchos nos decepcionó. Ahora ha vuelto renovado, aunque conserve el título de temporadas pasadas, con un equipo diferente y, por fortuna, unos contenidos que también lo son. No sé de quién fue la idea de fichar para este proyecto a Celia Montalbán y a Javier Gallego, pero sin duda fue un tipo con criterio. Igual que lo es quien decidió incluir en sus filas el ingenio y la maestría del ser humano revelación del siglo XXI.
Magnífica coincidencia que durante muchos meses el trayecto de vuelta a casa me pillara de nueve a nueve y media. El horario de siete a diez de la mañana es más fastidioso, pero ese es el precio que pagan los mitos de nuestro tiempo, comprometidos a estar ahí, haciendo la permanente a la señora actualidad, mientras el resto del mundo mascamos nuestra rutina un poco más divertidos.

Muy pronto, más sobre el tipo del sombrero gris...

28 agosto 2007

Náufragos (por Fernando León de Aranoa)

"Las turbinas del Europa se detuvieron con un sonido ronco. Sus 1.100 camarotes de lujo se escoraron levemente hacia estribor, donde se acumulaba el pasaje, movido por la curiosidad. Abajo, el oleaje amenazaba con hundir los restos de una embarcación harapienta, con 30 africanos a bordo. Alcanzaron la cubierta Windsor del crucero en buen estado físico, entre los aplausos y la emoción lógica de los pasajeros. El capitán les dio formalmente la bienvenida al Europa antes de hacer que se retiraran a descansar. "La ley del mar", pensó para sus adentros, "se escribe hoy con la caligrafía limpia de la solidaridad". Pero pronto comenzaron los problemas. Un delegado de la compañía trasladó su preocupación al capitán de la nave. Sólo quedan libres cabinas de primera clase y cinco suites en la cubierta Neptuno (...)"

Sigue en El País.
Visto en Senza fine.

15 agosto 2007

Los Junior

"Son más fuertes, más rápidos y tienen menos riesgo de sufrir un colapso cardiovascular que yo. Antes eran más pequeños que yo. Fueron niños cuando yo era adolescente. Entonces yo era más rápido y más fuerte que ellos. Ahora ellos son los adolescentes y mi cuerpo ha empezado a envejecer (poco, tampoco quiero dramatizar), con timidez, avergonzándose (...)"
Más en El Jardín

Envejecer es ir descartando sueños.

06 agosto 2007

La esperanza de lo imprevisto

Poco puede importar que una chica británica de dieciocho años se rompiera un tobillo el verano pasado. Pero a Kate Nash sus padres le regalaron una guitarra eléctrica para que pasara el rato mientras se recuperaba y probó a componer una canción. Hoy esa chica es el número uno de las listas de ventas de singles en Reino Unido y su disco sale a la venta hoy lunes, antes de lo previsto. Difícilmente podía imaginar que un año después de caerse por las escaleras iba a ser alabada por la crítica, cuando lo que ella realmente deseaba era convertirse en actriz, aunque no le iba nada bien... Como decía un gran tipo al que conocí hace años, "un imprevisto es nuestra única esperanza".



Fan absoluto. Gracias, Bea.

31 julio 2007

GTA Tetuán


No es fácil ser el propietario de esto. Cuando lo conducía mi padre, este coche era un Hyundai Accent plateado y bien atendido. Ahora que lo conduzco yo parece sacado de algún videojuego y, como digo, no es fácil pasear al volante de esta joya. Pero todos portamos nuestra cruz... y yo conduzco mi Hyundai San Andreas. Este es el balance (provisional) de daños:

-Techo: completamente abollado después de que unos desconocidos bailaran sobre él durante una nochevieja en Valencia. Dos días antes el coche había sido dado de baja de su seguro a todo riesgo. Era como si aquello estuviera pronosticando algo grande...

-Puertas traseras: columnas de garaje, no digo más. Tanto la izquierda como la derecha. Antes aparcaba en una plaza estrecha de arquitectura trajana y dormía poco porque trabajaba de noche. No más excusas.

-Aleta delantera izquierda: este me lo hicieron. Aparqué un par de horas junto a mi casa y cuando volví tenía un bollo neoimpresionista. Por supuesto, el autor no dejó nota.

-Parachoques trasero: Denia es la ciudad con los bordillos más altos del mundo.

-Capó: sin duda, mi obra maestra. El Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón decidió podar el día en el que empecé a trabajar allí. “Su vehículo ha sido afectado por el árbol”, decía una nota manuscrita de la Policía Municipal sobre el parabrisas de mi recién abollado autito. Un año después en un atasco, un decidido impacto a 10 km/h contra la rueda de repuesto blindada de un portentoso todoterreno hizo el resto. Imposible que colara ya lo de la rama.

Antes de tener coche, cuando veía uno abollado por la calle pensaba “yo sería incapaz de llevar el mío así”. Ahora he aprendido muchas cosas, la primera de ellas es que soy sobradamente capaz de hacerlo. Pero, insisto, no es fácil. Uno no se conoce del todo hasta que empieza a asistir al deterioro chapístico de su coche. Y yo me voy conociendo bastante ya... Creo que nunca podré discutir en igualdad de condiciones con otro conductor cabreado; siento que jamás convenceré a nadie para que se relaje en el asiento y disfrute del trayecto; me temo que a nadie tranquilizará que esté titulado en Conducción Deportiva en el circuito del Jarama. Pero hay algo de lo que estoy absolutamente seguro: nunca me prestaréis vuestro coche.


29 julio 2007

Eclipse lunar de parabólica


El 29 de julio del año 2007, la alineación entre la Luna y una de mis pupilas permitió presenciar un eclipse parcial a las 22:47 horas (20:47 GMT). Durante unos segundos, el juego de órbitas y la inclinación del eje de rotación de la Tierra propiciaron la observación de una extensión superficial equivalente a la de un hemisferio del satélite, oculto parcialmente por una antena parabólica y una cornisa del barrio de Tetuán. Un acontecimiento que sólo se pudo observar desde las coordenadas concretas de latitud y longitud que atraviesan mi terraza, y que no fue seguido por nadie. Habría invitado a los astrónomos de todo el mundo, pero me temo que, como sucede siempre, ya tendrían compañía.

25 julio 2007

Sustancia prohibida

PRESENTACION: textura suave. Gusto dulce y/o picante. Aromática. Talla media, piel tostada. Pelo moreno, largo y lacio. Exquisito gusto en el vestir y elegancia al andar. Ternura en el habla con un marcado acento.

CONSUMO Y EFECTOS: provoca sensación de euforia, bienestar y relajación; saturación de los sentidos, exaltación del estado de ánimo, cuadros alucinatorios; lenguaje incoherente, ilusiones y temblores. Disminución de la capacidad de concentración y persistente alteración del sueño. En contacto con la piel provoca el erizamiento del vello. Puede causar hipertensión, aceleración del ritmo cardíaco, dificultades en la respiración y aumento de la temperatura corporal. El contacto con la lengua dispara la sudoración, disminuye las inhibiciones y puede conducir al colapso hormonal, llegando incluso a la pérdida del conocimiento.

RIESGOS: altamente adictiva, capaz de generar dependencia aguda y síndrome de abstinencia prolongado. Tras varios días sin consumir, los síntomas multiplican su intensidad. Genera debilidad, sensación de fatiga, apatía, dolores de cabeza, irritabilidad, paranoia y confusión. Crea en el consumidor una profunda sensación de inseguridad. Aparecen las crisis de pánico y la depresión del sistema nervioso.

OBSERVACIONES: su consumo, tanto prolongado como esporádico, está altamente desaconsejado.

17 julio 2007

Hasta la mazorca

Afcorn returns. Y si no te gusta tira de la punta.

Diez cosas que (lamentablemente) no haré este verano

- fundar mi propia revista dedicada a las cosas verdaderamente importantes de la vida: el ocio
- alquilar un Corvette en Flagstaff, Arizona, y recorrer la antigua Ruta 66 hasta Los Ángeles
- montar una fiesta en una azotea con música y sofás para celebrar que somos jóvenes y guapos
- cocinar en mi propia casa para todos los que se alegren de que me haya comprado una casa
- comprar mi propia casa. Con cocina, azotea y un garaje para un Corvette. Comprar un Corvette
- terminar esta lista con las cosas que faltan para llegar hasta diez

15 julio 2007

El perdedor

Se despertó con la cara empapada. Era esa vieja sopa que formaba su propio sudor con la mezcla de los perfumes que quedaban impregnados en su almohada. Como cada mañana de domingo. Creyendo vivir al día, ignorando su estúpida condición, incubando soledad. Días atrás había decidido terminar con su juego de los últimos cuatro años. El escondite en un bosque abandonado en las tinieblas, los paseos al borde del acantilado donde rompen las olas de la discordia, las llamadas al timbre de un laberinto repleto de mentiras, de falsas apariencias y de hombres engañados. Jugaba sin brújula y sin red, atado a su confianza. Y no perdió, pero tampoco ganó nada. Y no encontró peor derrota que la que da por finalizada la partida sin concederle un sentido. El juego del vacío, la tumba del ganador. Sin victoria, sin medalla, sin una triste frase que le consolara antes de guardar las fichas y plegar el tablero. No volvería a lanzar los dados. Borró todos sus puntos y escribió una palabra en cada una de sus caras: “señoras”, “señores”, “con”, “ustedes”, “un”, “perdedor”.

11 julio 2007

Paisaje en rosa y jeans

Con pinceladas suaves, el autor ha logrado dibujar un entorno enigmático en el que se apoya el resto de la obra. Tonos pastel, con predominancia del fucsia y otros colores cálidos, otorgan al conjunto un equilibrio compositivo que integra las líneas abruptas de la parte superior y difumina los trazos marcados del primer plano, otorgando al resultado final una perfección casi inigualable. Pueden continuar la visita a su derecha, aunque comprendo que quieran quedarse eternamente contemplando este paisaje...

06 julio 2007

Maximus Reloaded

Vuelvo a tener Internet después de un año. Bueno, en realidad creo que sólo han sido dos semanas, pero se me han hecho más largas que la Semana Fantástica del Cortinglés (que también dura un huevo y de fantástica no tiene nada... por no hablar de los "Ocho días de oro", que tampoco sé cuántos son, pero no son ocho ni de coña).

Debido a un repentino y aún desconocido problema, mi PC se fue a tomar por culo y yo, que de informático tengo lo mismo que de astronauta, me fui con él. Han sido dos semanas en el abismo, temiendo que algún virus, el propio Windows XP (creo que compré la versión "Al Qaeda Edition") o el inevitable formateo que asomaba por el horizonte, enviaran al agujero negro del binario todas mis fotos y demás tontás que tengo en el ordenador.

Finalmente no ha sido tan grave. Los ceporros de PC City me ayudaron por teléfono (y los llamo ceporros porque insultarles va incluido en el dinero que pagué por su torpe servicio "Pc Clinic") y ahora, gracias a Dios (sólo en un 0,10%) todo vuelve a funcionar. Pero hay que ver lo vendido que se siente uno cuando le falla algo tan frío, inerte y asquerosamente material como la puta computadora.

No hay duda de que la humanidad se está cavando su propia tumba. Mucho se ha escrito sobre la rebelión de las máquinas y la derrota del hombre. Y ya sabemos que perderemos esa batalla. Mi generación lo sabe gracias a "Matrix" o "Terminator", la de mis padres gracias a "2001: odisea en el espacio"... Está claro que la hemos cagado. Bill Gates y toda esa panda nos han metido en esto hasta el cuello y cuando necesitemos salir ellos ya no estarán aquí. Habrán huido con todo su caché a un planeta de doble núcleo, donde escribirán sus memorias RAM y destruirán todos los archivos de sistema, que por cierto nunca supe distinguirlos de los normales. Pero al contrario de lo que nos ha contado la ciencia-ficción, para que llegue el fin de la humanidad no hará falta que las máquinas se rebelen. Bastará con que se jodan un par de ellas a la vez.

Nuestro mundo gira hoy en torno a un aparato innecesario hace veinticinco años y que hoy hemos convertido en imprescindible. Y lo peor es que me gusta. No quiero recordar cómo era la vida antes de Google (si es que la había) y espero que si, de pronto, surge un revolucionario que pretenda desvincular a nuestra sociedad de los ordenadores, venga un gran Transformer y lo aplaste contra el suelo. Porque esta es la esencia de la condición humana: hacer el gilipollas. Sólo así podemos explicarnos el cambio climático, el armamento nuclear o la foto de abajo. Somos humanos: somos gilipollas. Pero lo somos con un convencimiento tal que nos vemos dignificados. Y que así sea, por los siglos de los siglos.



24 junio 2007

Yattaaa!!

"Habitualmente hemos pensado: "tengo que aceptar a mi novia con sus virtudes y sus defectos, con su dulzura y su habilidad en el lanzamiento de jarrones", pero ahora además de sus rarezas (que todos las tenemos), también hay que aceptar las rarezas de toda la nueva familia política que hemos adquirido, por si no fuera suficiente con aceptar las de la propia (...)"

Todo lo que necesitas saber sobre tu familia política, a qué sabe el color azul, los cotilleos de las mejores series (Prison Break, Héroes, 24, la futura serie de Terminator y muchas más), dónde encontrar los mejores croissants de Madrid, los poderes del nuevo superhéroe San Francisco de Asís Ultra, cómo aceptar con honor lo de Milli Vanilli... Todo está en el número 2 de Doctor Geller.


Dr. Geller se puede adquirir en la líbrería Ocho y Medio de Madrid (C/ Martín de los Heros, 11), en Elektra Cómics (C/ San Bernardo, 20) y Madrid Cómics (C/ Silva, 17). Para recibirlo por correo, contacta con doctor-geller@hotmail.com o visita el blog del Doctor Geller.

Cejacas





Su nombre es afcorn.

20 junio 2007

Derecho de pataleta

Aprovecho, ya puestos, para felicitar a Paramount Pictures Corporation por defender con tanto ahínco los derechos de autor de otros y haber ordenado a YouTube que retiren mi preciada parodia subtitulada de Gladiator. Todavía no sé qué tiene que decir la Paramount en todo esto, pero bueno… Para que vean que no soy rencoroso, yo a cambio les vuelvo a promocionar su próximo taquillazo.

15 junio 2007

Derecho de rectificación

Al parecer, la entrada en la que publicitaba el II Festival de Música de Cine de Madrid – Soncinemad y en la que remitía a su página web para quien pudiera estar interesado en obtener más información, generó algunos malentendidos. Para que las aclaraciones expuestas en los comentarios de dicha entrada por los organizadores del festival no pasen desapercibidas y podamos rectificar así los posibles equívocos, reproduzco aquí parte de ellas:


(…) Los 130 euros corresponden al precio del Pase General al Festival de Música de Cine de Madrid, lo cual incluye LOS DOS CONCIERTOS SINFÓNICOS (el de Alan Silvestri y el Concierto Extraordinario de Kinépolis) además de las tres jornadas de conferencias y firmas de discos.

Los precios de los conciertos individualmente son:
- Concierto Kinépolis: 40 euros (precio único)
- Concierto Silvestri: desde 53 euros hasta 31,80 euros, según ubicación.
(…)


No era la intención de este blog confundir a los lectores, como tampoco lo era publicar toda la información detallada sobre el festival (para ello, título y texto de esa entrada enlazan con la página web de Soncinemad). Sí lo era en cambio expresar la disconformidad del autor con el precio del festival, que a buen seguro no va a lucrar a sus organizadores (y de festivales e iniciativas que requieren esfuerzo y no aportan dinero sabe algo quien escribe estas líneas…). También lo era apoyar el éxito de Soncinemad y contribuir a su difusión.

Por ello, y con mis disculpas a quienes se la pele todo esto, publico esta rectificación, algo que hasta ahora sólo he visto hacer a algunos periódicos y a TVE, así que de este modo me pongo al mismo nivel que Urdaci (el general que se convirtió en gladiador, el gladiador que deletreó a un sindicato, el deletreador que se reinventó a sí mismo).

10 junio 2007

Los muertos de mi felicidad (II)


Pasear por el casco antiguo de Lyón es atravesar un angosto pasillo que termina en 1940. Las agotadoras cuestas sobre sus colinas, las calles estrechas y las paredes grises en las que se intuyen lo que en su día tal vez fueron pasadizos y entradas secretas, hacen de la ciudad un museo del respeto a la memoria. En los muros, las placas recuerdan el lugar donde fue asesinado un general o donde fueron fusilados varios judíos. Casi todas acaban con una exclamación: “Paseantes, ¡alzaos!”

Lyón se convirtió, tal vez sin pretenderlo, en la capital de La Résistance. Aquí, cientos de hombres y mujeres valientes que no aceptaron la rendición oficial de Francia ante el nazismo decidieron organizarse y combatir, aun sin experiencia, contra un monstruo en expansión que había comenzado a aterrorizarles. Suena a historia antiquísima, pero muchos de esos artífices de la liberación de Europa aún están vivos. Quizás estén pasando sus últimos días en un asilo, o tal vez ya no recuerden las canciones subversivas de aquellos años. Pero la mayoría ya han muerto, y muchos de ellos lo hicieron hace más de sesenta años.

Me resulta extraño sentir admiración por gente con la que difícilmente podría identificarme hoy. Tal vez por ser de esa generación Malasaña o por los valores en los que he sido educado, no encuentro ideal suficientemente bueno como para coger un arma y quitarle la vida a nadie, pero la Historia la han escrito los que sí lo hicieron. No me atrevo a afirmar que el mundo sería hoy igual que si no hubieran existido. En ocasiones me gustaría poder dar las gracias a todos los que han hecho que el mundo sea menos oscuro. Pero no hay más que ver el título de este blog para darse cuenta de que no soy aficionado a abanderar causas, o pararse a escuchar a los terroristas para descubrir que la base de su pensamiento es parecida. Por eso creo que todo lo que se puede hacer es alzar el espíritu en una calle de Lyón o, como canta Silvio Rodríguez, pedir perdón por este día a los muertos de mi felicidad. Y pese a todo intentar que mi paso por el mundo sirva para algo. Ojalá algún día sienta que lo he conseguido.


08 junio 2007

Los muertos de mi felicidad (I)

Pertenezco a una generación vacía. Y perdónenme todos los que se acercan a esta página orgullosos de haber crecido en los ochenta. Somos la generación del Un, dos, tres, la que pasó horas matando marcianitos y todo lo que nos quieran recordar, pero dudo de que seamos recordados por dejar nuestra impronta en la historia. Mi sabio amigo Jotono lo resumía anoche con poética claridad mientras observábamos a un notas meando al lado de su casa: no somos hijos del Parnaso en la Plaza de Santa Ana, no somos los héroes de Mayo del 68… nosotros somos de Malasaña. Eso significa: en una mano un mini y en la otra la churra meando en un portal.

Madrid es una ciudad sucia. Ya lo digo yo por Sánchez Dragó, que no cobro de Telemadrid. Es asquerosamente guarra. Y somos nosotros los que la hacemos así. Quien no haya ensuciado nunca el centro de Madrid que tire la primera piedra o eche la última pota. Nuestro himno son los gritos que atormentan a los vecinos. Nuestra bandera, la firma en la pared de un niñato con un rotulador negro de punta gorda. Bueno, ya seguiré con esto... Ahora salgo pitando a Tribunal, para diluirme entre mi generación...

02 junio 2007

Soncinemad 2007

Vamos a hacer promoción gratuita a esta gente, aunque ellos no es que vayan precisamente de gratis... El próximo 29 de junio comienza el II Soncinemad, festival de música de cine al que el año pasado acudieron algunos compositores de los grandes. Este año tampoco tiene mala pinta, pero los 130 eurazos que nos quieren clavar me echan un poco para atrás. Además de las conferencias en Kinépolis, habrá un concierto de Alan Silvestri que seguro va a merecer la pena. Igual me apunto sólo a esto.
La organización del festival es, estéticamente, bastante normalita, pero preparar una cosa de estas no es fácil y el año pasado salió bastante bien. Además, creo que hacía falta algo así y quiero que se convierta en una referencia mundial. Sólo hace falta que bajen un poco el precio.



Mejor al revés

Tienes razón, Bea. Así mola mucho más... Es hora de melodías alegres: Sarkozy le ha dado la mano a ZP, EE.UU. y España han bienhumorado un rato e Irán dice que quiere acabar con los malos rollos nucleares. Hasta parece que incluso yo he hecho las paces... Speranza senza fine per un mondo più bello.


Esta va para Nacho, un grande.
No nos ocurre nada que no estemos preparados para soportar

Ese papa libertino

Me envían un enlace para medir mi ideología. Me quedo mucho más tranquilo al saber que estoy más a la derecha que ese viva la virgen del pontífice... Yo soy en el punto que marca la estrella:

También me complace saber que soy más autoritario que John Kerry, el Miguel Sebastián de América. Espero vuestros resultados del test.

Gracias, Blanca.

30 mayo 2007

De planta en planta y firmo porque me toca



Puede parecer simplemente un magnífico anuncio. Pero a mí hasta me ha hecho pensar.

Visto en En busca del mar.

29 mayo 2007

El saxofonista en el tejado


Ni siquiera cuando lo hice sabía muy bien qué quería decir con esto. Pero hace justo cuatro años que perdí un par de horas con el dibujo y tengo la impresión de que ahora me parezco a ese muñeco al que no le di sentido alguno. A veces creo que en este tiempo me han pasado un montón de cosas, y otras veces siento que sólo me ha pasado una. Sea como sea, y como cantaba Radio Futura, cierro los ojos y bailo al borde del tejado.

28 mayo 2007

Laberinto

Despertó con la boca seca y la camiseta empapada. Uno más de los muchos contrastes que encontró de repente en su dormitorio. Una nueva decoración pero un sentimiento de hartazgo. Las estanterías llenas de libros pero la sensación de no tener nada interesante que leer. Ella, dormida a su lado, hermosa, vulnerable. Pero también la certeza de que aquella historia le estaba destrozando. En su apariencia angelical ya no veía inocencia, sólo dudas. Y la inevitable sospecha de que todo ese dolor fuera intencionado. Se levantó de la cama y fue a la cocina. Bebió un poco de agua, metió la camiseta en la lavadora, se dio una ducha y encendió el ordenador. Tecleó unas direcciones. Imprimió un papel: la reserva de un billete con destino a Lyón. Preparó una bolsa de viaje con algo de ropa y un libro prestado. Al cerrar la cremallera ella se despertó. “¿Dónde vas?”, le preguntó aún semidormida. “Salgo del laberinto”, contestó. Y ella volvió a dormir.


26 mayo 2007

Tiempos duros para el romanticismo

Tiempos duros para la creatividad, según el jurado del festival de publicidad de San Sebastián. Dicen que el nivel en general ha sido bastante flojo, pero no en la categoría de televisión. Ahí la publicidad argentina ha vuelto a destacar y el Sol de Oro se lo ha llevado esta campaña:







Jornada de reflexión

Queridos conciudadanos políticos:

Esta noche no me dirijo a vosotros como un miembro más del escéptico y hastiado electorado local y autonómico. En esta jornada reservada para la reflexión y el descanso me erijo como representante de mí mismo con la firme determinación de adelantaros que mañana, en la cita que nos reunirá a muchos junto a las urnas, experimentaréis en vuestras carnes el doloroso latigazo del fracaso democrático.

En una nueva exhibición de lo que os gusta llamar Democracia, millones de españoles como yo acudiremos a votar, resignados a la idea de que, como dijo el gordo ese, este es el menos malo de todos los sistemas. Pero dentro de la mediocridad a la que puede aspirar este régimen parlamentario en el que vosotros decidís y nosotros aceptamos, no debemos olvidar que la responsabilidad de haber convertido una expresión de libertad en un festival de confetti recortado en forma de papeletas recae fundamentalmente sobre vosotros.

Estimados candidatos, vuestro poder reside en el pueblo, pero este pueblo no sabe qué hacer con él. Y eso es lo que más os gusta. Manejáis –o intentáis manejar, a la vista de la campaña que habéis llevado a cabo– el continente ignorando el contenido. Habéis convertido las ideas en clones pintados de distinto color. Escupís con vuestros discursos sobre la inteligencia de quienes os escuchan. Y, lo peor de todo, os creéis que lo hacéis bien. Pero hay algo que habéis olvidado: mañana obtendréis votos, pero los comicios de la Historia no dependen de vuestra habilidad –mal llamada– política. Sólo los dignos serán recordados. Lo de mañana no es más que una meta volante en vuestra carrera de vanidad.

Adaptando a uno de aquellos grandes, quiero enviaros un mensaje: no os preguntéis qué podéis hacer para obtener mi voto, sino qué puede hacer mi voto para que todo esto sirva para algo.

Absurdamente vuestro,


14 mayo 2007

Sólo se transforma

Ahora mismo no recuerdo quién fue el cachondo que se sacó de la manga aquello de que "no se crea ni se destruye, sólo se transforma". Pero sin duda era un listo. Sus aplicaciones más habituales son la energía y la materia, pero si te fijas bien sirve para un montón de cosas. ¿Que no tienes ni puta idea de definir algo? Pues di que ni se crea ni se destruye y que sólo se transforma y, además de quedar como un Nobel, probablemente acertarás.

Esta tarde he descubierto que se puede aplicar a la felicidad. Desde Aristóteles hasta mi vecina de abajo se han preguntado alguna vez en qué consiste la felicidad. Y yo, queridos amigos, he descubierto que no se crea ni se destruye... en efecto, sólo se transforma. Porque lo que crees que hoy te haría feliz, cuando lo tengas te aburrirá. Y querrás otra cosa. Ya sé que esto no es nuevo, pero está tan presente como la materia o la energía, que llevan toda la puta vida transformándose. El que no tiene trabajo quiere un contrato fijo, y yo, que tengo uno por cinco años, lo que quiero es que no me den los 31 con esta misma cara de sueño. La que tiene novio se cansa, y el que no la tiene la quiere. El que tiene exámenes se agobia, y yo pagaría por volver a la universidad. El que se ha ido a vivir solo echa de menos su vida de pensión, y yo busco ahora un ático en el que aprender a planchar y cocinar. Quizá resulte que la felicidad se crea y se destruye a toda velocidad. Lo que sí estoy seguro de que se transforma es la próxima maravilla del maestro Michael Bay. Ese sí que sabe hacernos felices.

05 mayo 2007

Born to be wild



Si es que cada día se parece más a Dennis Hopper...

03 mayo 2007

SMS

Estás hasta arriba de trabajo, atrapado por las prisas y sin capacidad de atender a nada que no sea terminar lo que tienes entre manos. Suena el teléfono, es un mensaje. No tienes tiempo para mirarlo. Quizás sí. Mejor no. Sigues trabajando, se te echa el tiempo encima. Decides mirar el móvil: tal vez sea alguna alerta con últimas noticias. A lo mejor es un amigo con algún plan interesante o sólo un mensaje de tu operador con una estúpida oferta para enviar dos mil mensajes al precio de mil. Pero no. En ciento cincuenta caracteres tu pasado interrumpe tu frenética jornada laboral y te hace una inesperada visita en el momento menos oportuno. El momento en el que te ves desde fuera agobiado por cosas supuestamente importantes, que en realidad no tienen nada que ver con una tarde en la playa, una noche de música o un amanecer entre sábanas mal repartidas. Ese mensaje te despierta del letargo: te estás perdiendo. “No t imaginas cuanto he llorado x ti. Yo seguire aki mientras tu sigas n mi corazon”. Cada minuto ante el ordenador es un metro bajo tierra. Pero no hay tiempo de sentir. Vuelves al presente, levantas la cabeza y por error tocas el botón equivocado. Has borrado el mensaje. Travesuras del destino. No hay tiempo para lamentarse, estás hasta arriba de trabajo.

29 abril 2007

Solamente estar

Es calma, es miedo, es placentero pero también amargo. No sé exactamente qué es, pero me gusta, y por eso vengo a verte. Si me haces preguntas tal vez indague en la respuesta, así que mejor si no sacamos el tema. Sólo siéntelo y déjame seguir respirando tu perfume. Me atrae tanto. De forma infantil y casi inconsciente acudo a tu olor simplemente para estar. Lo creas o no, esto es lo que quiero. Porque cualquier otra cosa te haría daño. No saquemos el tema y déjame saborear tu compañía. Me ayuda a olvidar lo de siempre, mi viejo laberinto sin salida en el que ya empiezo a marearme. Préstame tu presencia, dulce deleite con un leve toque amargo que aún puedo soportar.

11 abril 2007

Dos futuros

Nunca te engañé, siempre tuve claro que no teníamos ningún futuro. Hoy me conformaría con un presente, pero ya no hay sintonía. Supongo que algún día te lo agradecerás. Asumir el riesgo de no arriesgar es también arriesgar demasiado, así que nadie te podrá recriminar que dejaste pasar las horas sin despertar. O sí. Sólo te digo que no quiero atravesar la delgada línea que separa el amor del odio, no es ese mi futuro, puedes estar tranquila. No juguemos más y todo quedará así, en el pasado. Pero si prendemos la mecha todo estallará. Hoy rezo por un futuro posible aún por imaginar. El tuyo ya lo tienes. Y aunque aún estés en todas partes, buscaré un presente sin ti.

08 abril 2007



Domingo de resurrección

Pasión y muerte si es preciso. Préstame tu pelo y cierra los ojos. Deja que mis manos te digan lo que no me atrevo a pronunciar. No digas nada, sólo cierra los ojos, tumbada en el sofá. Déjate acariciar, olvida la razón, es cuestión de fe. Yo la estoy perdiendo, ayúdame a creer de nuevo en mí. Siente las cosquillas, apoya tu cabeza y no abras los ojos. Dichoso yo, que creo sin haber visto este sueño prohibido que ojalá compartas algún día. No apagues la tele, no me molesta. Bajemos el volumen y subamos la temperatura. Mi mano comenzará a confesar lo que jamás me atreveré a decirte. Sí, es a ti. Sé que no debes, perdóname las consecuencias. Sólo por esta noche, pasión y muerte, y mañana Dios dirá. Te prometo que despertarás con un abrazo. Te desearé un feliz domingo, y tu olor bendito me hará desear también un lunes de resurrección.

29 marzo 2007

Atención, señores pasajeros


"El personal de este aeropuerto y las autoridades de nuestro país les dan la bienvenida y les desean una feliz estancia. Por favor, diríjanse a las cintas mecánicas para retirar su equipaje y tengan la precaución de no perder de vista sus pertenencias. Rogamos a los señores pasajeros procedentes de vuelos internacionales que acudan a la zona señalizada para pasar los controles pertinentes. Por favor, no olviden llevar a mano su pasaporte y otros documentos que deban presentar en la aduana para evitar la prolongación del tiempo de espera, ya que la vida es sorprendentemente breve. Aquellos que viajen sin nada que declarar, diríjanse a la salida. Quienes deban declarar equipajes, háganlo en los mostradores destinados a tal efecto. Y quienes estén aquí por alguien especial por quien haya merecido la pena realizar el desplazamiento, tengan la cortesía de no dejarse nada en la recámara. Porque tal vez cuando vuelvan a verse ya nada sea igual. Dicen que el tiempo lo cura todo, pero el personal de este aeropuerto, experto en retrasos, kilómetros y cancelaciones puede asegurarles que el tiempo, más que curar, hiere. Así que no duden en decirse todo lo que tengan que decirse y hacer todo lo que deban hacer. Porque de nada servirán las promesas, los deseos y las lágrimas de aeropuerto. Señores pasajeros, el tiempo y la distancia lo cambian todo, y a través de ellos no se pueden efectuar reservas. La próxima vez todo será distinto. Por su propio interés, no lo olviden. Para cualquier otra información pueden acudir a los mostradores o dirigirse al departamento de atención al pasajero. Muchas gracias por su atención, valor y buena suerte".

27 marzo 2007

Habla con tu médico

¿Te salen burbujas inmobiliarias? ¿Se te está empobreciendo el uranio? ¿Te duele España? Si es así, no acudas al Doctor Geller. La prestigiosa publicación que acaba de ver la luz en las calles madrileñas sólo aborda temas importantes: series de televisión, Hollywood, cambios hormonales y París.

Dr. Geller, proyecto parido, previamente gestado y anteriormente fecundado por el inimitable Clark Kent es mucho más que un fanzine. Es un punto de encuentro para compartir todas esas inquietudes que de verdad importan: ¿qué es mejor, el Cola Cao o el Nesquik? Los gofres, ¿con o sin chocolate? Estas y otras cuestiones son abordadads en sus páginas y también en su participativo blog.

Dr. Geller, el consuelo a tu desazón, lo puedes encontrar en:
Madrid Comics: C/ Silva 17 (metro Gran Vía)
Elektra Comics: C/ San Bernardo 20 (metro Gran Vía)
The Comic Co.: C/ Divino Pastor 17 (metro Tribunal)
Akira Comics: Avda. Betanzos 74 (metro Herrera Oria)
Internalia: C/ Galileo 84 (metro Islas Filipinas)


http://doctorgeller.blogspot.com/

18 marzo 2007

Una llamada perdida


Te parecerá mentira que te escriba ahora. No sé si es una sorpresa agradable o si te molesta que me entrometa en tu vida después de tantos años. Ni siquiera sé si conservas esta dirección de correo electrónico, así que algo me dice que jamás llegarás a leer este mensaje. Pero quería devolverte aquella llamada perdida... aunque sea doce años después.

¿Cómo te va todo? Supongo que tendrás un montón de novedades desde aquella tarde de primavera de 2007 en la que quedé en llamarte a las ocho. Quiero pedirte disculpas. A mí no me va mal, o al menos eso es lo que la gente dice. Conseguí dejar el periodismo después de muchas dudas. Ahora me gano la vida escribiendo columnas y alguna que otra novela, me mudé a este apartamento en el Upper West Side de Manhattan y no me falta compañía, aunque no logre que sea la misma todos los meses. De algún modo es como si se hubieran ido cumpliendo mis aspiraciones, si bien no encuentro nada más preocupante que este camino hacia la satisfacción. Los que creen en la suerte dicen que soy un afortunado, y los que no, aseguran que soy de los que toman siempre la decisión correcta. Yo, que no sé en qué creo, prefiero pensar que hay un poco de las dos cosas, aunque me temo que en esa combinación entre fortuna y puntería hay algo que no termina de dar buenos resultados.

Mañana cumplo cuarenta años y cuando miro atrás soy incapaz de distinguir dónde he dado esos pasos certeros que fueron desviando mi camino hasta esta sexta planta de un bloque residencial en Nueva York. Si quisiera volver atrás no sabría dónde pisar primero, pero tampoco querría hacerlo, salvo para cambiar alguna que otra decisión equivocada. La que tomé a las ocho de la tarde de un domingo en la primavera de 2007 está demasiado lejos, así que no te preocupes, esto no es más que un email a punto de desaparecer.

Cuando le dé al botón de "enviar" estas palabras tal vez se pierdan en el ciberespacio hasta estrellarse contra un buzón de entrada bloqueado por el paso del tiempo. No importa. Quizá en su viaje por la nada se crucen con las palabras que iban a pronunciarse en aquella llamada que no llegué a contestar. Si entre ellas logran entenderse ya habrán conseguido más de lo que conseguimos nosotros hace doce años. Si no se entienden o ni siquiera se cruzan compartirán conmigo la sensación de haber recorrido el camino correcto en el que, a pesar de todo, lo que debió haber sido al final nunca llegó a ser.

14 marzo 2007

Cuando seas mayor

No es que fuera especialmente listo, pero si había algo que le molestaba a Tomás era sentirse tonto. Ya de pequeño tenía que enfrentarse cada dos por tres a esa dichosa frase que parecía servir como respuesta a todas sus preguntas: "cuando seas mayor lo entenderás". A veces era su padre, otras veces su madre o alguna de sus hermanas mayores. Siempre salían con la misma coletilla. Lo preguntaba casi todo porque le incomodaba no entender casi nada. No entendía, por ejemplo, por qué su hermana llegaba llorando a casa después de cada clase con su profesor particular. ¿Por qué lloras si es evidente que te has liado con él durante toda la hora y media? Cuando seas mayor lo entenderás. Tampoco comprendía por qué en esa película la rubia le propinaba al arrogante del sombrero una sonora bofetada y acto seguido se besaban apasionadamente. ¿Por qué le pega entonces? ¿Se quieren o se odian? Preguntas, también, para mayores.

Tomás decidió no preguntar más y esperar al momento de obtener las respuestas. Hasta que un día, acercándose peligrosamente a los veintisiete, recordó todas aquellas dudas que le asaltaban ante ese tipo de situaciones. Qué desagradable fue descubrir que seguía igual que entonces. O es que a su edad no era todavía lo suficientemente mayor como para entender todo aquello que nadie le quiso explicar nunca... o bien es que era el único gilipollas de la familia. Pero seguía sin entender nada. Tomás no era especialmente listo, pero quizá de pequeño no se habría sentido tan tonto. Porque al menos cuando era niño nadie le quiso contestar. Pero ahora, ya mayorcito, había asumido como normales todas esas cosas inexplicadas.

28 febrero 2007

Días grises

Si te conociera mejor tal vez sabría decirte la palabra exacta, la frase oportuna que alivie un poco la angustia de estos "días grises". Pero a pesar de la empatía seguimos siendo unos desconocidos. Me encantan las risas, pero quizá hoy necesitas algo más. Sin embargo siento que no puedo hacer nada desde este lado de la ventana. Sólo puedo regalarte este arco iris que coloreó mi gris fin de semana. Espero que pronto lo veas también en uno de los tuyos.

27 febrero 2007

El Cerro Uritorco

Dicen que hay un momento para todo, también para ir al Cerro Uritorco. Cojamos las mochilas, la tienda de campaña y vayamos a pasar el fin de semana. Hagámoslo por todos aquellos que lo dieron todo. Con valor, con su propio sacrificio. El Cerro Uritorco está plagado de historias. De experiencias no vividas. Allí, enterradas bajo capas de tierra, están todas esas fiestas que siempre soñaste pero que nunca se celebraron. Un arqueólogo encontraría todos los momentos que alguna vez deseaste vivir pero que te pasaron silbando delante de la cara. ¿Por qué los dejaste pasar? No te preocupes, todos están en el cerro, esperando. ¿Cuántos años tienes? ¿Veintiséis? ¿Veintiocho? ¡Vamos! Es el momento. Por todos aquellos que se sacrificaron. Por los que no pudieron. Por todos nosotros. Al cerro ya.

22 febrero 2007

Retirada de tropas



Un ejemplo divertido del aburrimiento de los soldados. Lamentablemente, hay otros ejemplos de la denigración a la que lleva a veces ese aburrimiento. También del peligro y el pánico que sufren los soldados. El resto, lo vemos a diario. Cada día me da más asco esta guerra. Iraníes, id haciendo las maletas...

18 febrero 2007

Génesis

Al principio creó Dios los cielos y la tierra. Todo era soledad y caos y las tinieblas cubrían la faz del abismo. Dijo Dios: "hágase la luz", y creó tus ojos. Los puso Dios en la bóveda del cielo para iluminar la tierra, para regir el día y la noche, y para separar la luz de las tinieblas. Y vio Dios que era bueno, los llamó estrellas, y pasó una tarde y pasó una mañana: el día primero.
El segundo día separó Dios la tierra de las aguas, moldeó las montañas y dibujó el contorno de tu piel. Dijo Dios: "hagamos la belleza", y del barro húmedo te creó perfecta. Y vio Dios que eras hermosa, te llamó Ángeles y pasó una tarde y pasó una mañana contemplándote: el día segundo.
Amaneció Dios algo triste el día tercero. Sembró la tierra de plantas y árboles, y te entregó sus semillas. Te regaló sus frutos para que te alimentaras de ellos y no te prohibió ninguno. "Con un fruto prohibido es suficiente", dijo Dios mirándote fijamente. Y no le entendiste... y pasó el día entero.
Y vio Dios que las bestias que poblaban la tierra, las aves que surcaban el cielo y los peces que se deslizaban en el mar no tenían nombre. Y creó Dios tus labios para que eligieras una palabra para cada uno. Sólo te prohibió una: "eternidad". Y pasaste el cuarto día jugando a nombrar las especies.
Vio que todas las palabras que habían salido de tus labios eran hermosas. Creó tu nariz para que respiraras el aire, tus manos para que tocaras el paraíso y tus pies para que lo atravesaras. Vio Dios que todo lo que había creado era bueno. Pero entre toda su obra sólo te premió a ti con la libertad.
El sexto día Dios te insufló su aliento. Su soplo de vida tocó tus labios y una lágrima brotó de los ojos de Dios. Comenzaste a existir, a su imagen y semejanza. Y pasó una tarde y pasó una mañana.
Amaneció el séptimo día y no encontraste a Dios. En medio de la creación, estabas sola en el mundo, buscando un sentido a aquel Edén. Dios desapareció, herido por el tacto de tus labios. Abandonó el universo y no lo gobernó más. Pasó los años recordando, soñando con el día en que el leve roce de tu boca no le provocase el mismo intenso dolor. Dispuesto a esperar toda la eternidad.