18 octubre 2006

Día de lluvia

No hay nada inocente en tus pasos. Pero queda algo de inocencia en tus palabras. Dominas el camino, conduces como nadie cada situación. Sin embargo seré yo quien lleve ahora el volante de esta historia. Admite que a estas alturas has perdido casi todos los puntos. Demasiada experiencia. Primero fue el exceso de velocidad... aprendiste a ir más despacio. Las maniobras temerarias decidiste dejarlas para los circuitos cerrados y ya nunca arrancas si antes has bebido. Lo aprendiste sobre la marcha. Hoy ha vuelto la lluvia, y en mojado se te da peor. He abierto el paraguas. Has medido cada una de tus miradas. Has sabido dónde colocarte para no desaparecer de mi vista. No hay nada inocente en tus movimientos. Pero hablando te delatas. Te veo mañana... esto no se decide en una sola carrera.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pero mirá que sos flashero ehh.. porque siempre que escribis cosas raras pones a esas gorditas sin cabeza??... ja (vale tambien para la que le dedicaste el poema del culo) jajaj
igual TKM.
beso